Como sabéis, en anteriores ediciones de «Con la Cámara a Cuestas…» hemos tratado Desperfectos y Lesiones en Edificios debido a la mala ejecución de los mismos, o a falta de previsión en proyecto, inadecuados materiales u otras causas. Sin embargo, en esta ocasión vamos a tratar lesiones producidas en las edificios una vez terminados y en uso.
El edificio que vamos a ver lo visité hace un tiempo para la Redacción de un Informe de Patologías en calidad de Perito Judicial en Valencia. Las lesiones que me encontré durante mi inspección fueron muchas y con muy diversos orígenes, desde la mala ejecución hasta la falta de previsión de algunos detalles durante la redacción del proyecto, pero las lesiones que os voy a comentar fueron debidas a trabajos realizados por diversas empresas cuando el edificio ya se encontraba en uso. Se trata de trabajos de instalación de antenas o equipos de climatización en cubierta.

Como os comentaba, el edificio presentaba algunas lesiones que tuve que inspeccionar como Perito Judicial, algunas de las cuales se encontraban en la última planta del edificio, en cada uno de los 14 casetones que tenía el mismo. Se trataba de unas humedades que habían aparecido justo en la parte inferior del forjado que cubre la escalera de acceso a las plantas.



Suele ser habitual que se tenga prevista una zona en la cubierta de los edificios para albergar equipos que serán utilizados en las viviendas, por lo que estos equipos son instalados por profesionales contratados por particulares, que pueden conocer perfectamente su trabajo en cuanto a la parte mecánica o técnica del equipo que estén instalando, pero que desgraciadamente desconocen en muchas ocasiones las características de los edificios, por lo que pueden llegar a provocar diversas lesiones debidas a los trabajos que ejecutan. Deberían tener una pequeña formación para conocer el entorno donde van a realizar las instalaciones, ya que de lo contrario llegan a producirse situaciones como las que vamos a ver a continuación.

Una de las instalaciones que nos encontramos siempre en las cubiertas de los edificios son las Unidades Exteriores de Aire Acondicionado. En edificios más nuevos es habitual que se encuentren zonas previstas y preparadas a tal efecto, con las conducciones canalizadas o listas para serlo y con bancadas preparadas para la sujeción de los equipos.
En otras ocasiones, los equipos exteriores se instalan en zonas previstas de la propia vivienda, en balcones o terrazas. En estos edificios en los que no se tiene prevista la instalación en cubierta no es raro que las viviendas de últimas plantas acaben utilizando la misma para no ocupar espacio propio.

Como comentábamos, los profesionales encargados de las instalación de éstos equipos pueden ser perfectos conocedores de los mismos, pero no tienen en cuenta la zona de la instalación. Quizá si, seguramente serán conscientes del daño que pueden ocasionar, pero no se preocupan del mismo, al fin y al cabo a ellos les pagan por instalar el equipo… y eso hacen!!! Al precio que se pagan algunos de estos equipos, ya es mucho que incluya la instalación, así que no le pidamos que encima el instalador sea bueno!!!
Como podemos ver en la siguiente imagen como la instalación del equipo de climatización se ha realizado atornillando directamente al suelo de la cubierta. Es evidente que la lámina impermeabilizante ha quedado dañada por dicha perforación.
Algunos pueden decir que al llevar tacos de goma se impide la entrada de agua a través de la perforación realizada, que en algunos casos puede llegar a ser cierto si el taco es adecuado y está bien colocado, pero en ningún caso puede impedir que le llegue el agua que puede discurrir sobre la lámina, por debajo de la baldosa. De todos modos, los tacos que vamos a ver no tienen la misión de impedir la entrada de agua, sino más bien de impedir la transmisión de vibraciones.
También hay que destacar que, aunque se coloque un taco para impedir el paso de agua a través de la perforación, le hemos ocasionado un agujero a un elemento que se verá debilitado en ese punto, el cual constituye una zona débil por donde iniciará su degradación y seguramente su rotura tras algunos ciclos de dilataciones y expansiones normales.

Además de los anclajes, es habitual encontrar otro fallo muy importante en las instalaciones de equipos de climatización en cubierta. Este además creo que debería ser tratado en fase de proyecto, pues en realidad es parte de la preinstalación de los equipos. Se trata de la zona por donde aparecen los conductos desde las plantas inferiores.


Es evidente que cualquier perforación realizada en la parte superior de un plano es susceptible de permitir el paso del agua a través del mismo, aunque se trate de una perforación tapada por los conductos, ya que siempre existirá una junta entre el conducto y la fábrica por donde se va a colar el agua.
En algunas ocasiones, las «mentes privilegiadas» de nuestro sector tratan de evitar la entrada de agua con soluciones como la que podemos ver a continuación.

Ya en un post anterior os comenté el «amor» que le tengo al Caucho Clorado, así que no vale la pena que pierda tiempo comentando lo inapropiada que me parece ésta solución. Al menos lo han intentado, ya que en las imágenes anteriores ni siquiera se han preocupado de eso.
Desde luego, éstas no son soluciones adecuadas, por lo que considero que la solución debería encontrarse prevista en proyecto o al menos ser ejecutada correctamente bajo las órdenes de un técnico durante el proceso de edificación. La solución que yo propongo pasa por sacar los conductos por el lateral de una bancada, colocando una pequeña visera que impida la entrada de agua a través de las perforaciones. simple, fácil, limpio, cómodo… Aunque seguro que hay más soluciones posibles.
Otra de las causas de humedades que encontré durante la inspección de éste edificio fue la instalación de antenas. Desde la aparición de la Televisión Digital Terrestre, creo que el número de antenas parabólicas que se instalan en los edificios seguramente habrá disminuido, pero las que se colocan pueden producir graves daños en la impermeabilización de las cubiertas.

Al igual que ocurre con los equipos de climatización, las antenas de televisión deben ir ancladas a algún punto fuerte para evitar que salgan volando con el viento y para mantener su correcta posición, por lo que los instaladores de las mismas, ni cortos ni perezosos, se dedican a ejecutar éstos anclajes directamente sobre la cubierta del edificio, sin tener en cuenta el daño que en la mayoría de las ocasiones le están produciendo a la impermeabilización del edificio.

Si que parece que bajo la placa de anclaje se haya colocado algún tipo de goma para impedir el paso de agua, pero como se ha comentado anteriormente, el daño puede no ser directamente el agua que pueda atravesar la perforación, sino la que pueda venir de otros puntos por encima de la lámina o también el punto débil que se ha creado en esa lámina impermeabilizante.
Tanto en el caso del anclaje de equipos de climatización como en el caso de instalación de antenas de televisión debería estar prevista su colocación, no se si en proyecto o durante la propia ejecución de la obra, de modo que existieran una bancadas sobre la cubierta sobre las que se pudieran ejecutar perforaciones para el anclaje de equipos sin peligro de perforación de la lámina.
Además, considero que en caso de no existir, los propios instaladores deberían tener en cuenta ésta circunstancia a la hora de pasar presupuesto de instalación, de manera que tuvieran prevista su ejecución. Evidentemente encarecería la gran mayoría de las instalaciones, pero por otro lado sería un factor diferenciador entre edificaciones ejecutadas con mayor calidad… entre otras muchas cosas circunstancias.

Evidentemente, en este caso el instalador de los postes que observamos si que tuvo el cuidado de anclarlos sobre unas bancadas para evitar daños sobre la impermeabilización, lástima que el que instaló posteriormente los equipos de climatización no se copiara y lo hiciera igual de bien.
Ya que estamos hablando de perforaciones en cubierta, en este mismo edificio puede observar una circunstancia que seguramente debería atribuirse a una falta de previsión en proyecto y a un deficiente control durante la ejecución de la obra.
Los espacios que hemos estado viendo han de ser accesibles, por lo que para acceder a los mismos en condiciones de seguridad adecuadas, se instaló una escalera metálica como la que vemos en la imagen.

Ésta escalera, al igual que los equipos de climatización y las antenas de televisión que hemos visto, se encuentra anclada directamente a la cubierta, llegando a perforar también la lámina de impermeabilización existente y contribuyendo a la patología de humedades que hemos visto en las primeras imágenes, que además se reproducía en casi todos los casetones de este complejo residencial.


Es posible que los anclajes de ésta escalera no sean suficientemente profundos y se queden en la masa de mortero de agarre o de regularización existente sobre la lámina, pero en cualquier caso no parece muy estudiada la solución adoptada, dejando que la patología se produzca o no en función de la longitud del tornillo que decida emplear (o que tenga a mano) el encargado de instalar la escalera.
Otro tema que trataremos en breve en el blog será el tema del mantenimiento de nuestros edificios, pues como veis en las anteriores imágenes, el acero de los anclajes de la escalera empieza a presentar síntomas de oxidación por encontrarse muy expuesto a la humedad ambiental.
En este mismo edificio me encontré otros temas de mantenimiento como el que vemos en la siguiente imagen, pero como os digo, eso lo dejaremos para otro artículo!!!!

¿Crees que las instalaciones a ejecutar con el edificio terminado debería estar previstas en proyecto? Me encantaría conocer tu opinión a través de los comentarios.
Enrique Alario | Arquitecto Técnico Valencia | Máster en Tecnología de la Edificación | Perito Judicial
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