Ebooks descargables gratuitos para profesionales: “Geomallas para el refuerzo de pavimentos” y “Geocompuesto de bentonita para la edificación”.
La empresa dedicada a la fabricación de geotextiles, geomallas, y fibras sintéticas de refuerzo, Tex Delta, abre un nuevo canal de comunicación con los expertos en la construcción con el lanzamiento de ebooks descargables gratuitos para profesionales del sector. Hasta el momento, Tex Delta ha publicado dos libros técnicos: “Geomallas para el refuerzo de pavimentos” y “Geocompuesto de bentonita para la edificación”.
Tex Delta es una empresa especializada en la fabricación de geotextiles con una larga trayectoria, ya que fue fundada en 1968. Durante todos estos años, la empresa ha conseguido innovar tanto en el desarrollo de nuevos productos cada vez más especializados, como en la forma de acercarlos a los profesionales de la construcción.
Una de las vías que propone Tex Delta para ayudar a conocer mejor los geotextiles y geocompuestos son los ebooks. Los libros que han publicado pueden encontrarse en su página web www.texdelta.com y son de descarga totalmente gratuita. En ellos, los profesionales del sector de la construcción podréis profundizar en el uso, aplicaciones y ventajas de la aplicación de determinados productos en la obra.
El ebook “Geomallas para el refuerzo de pavimentos” es de una guía totalmente práctica en la que se tratan temas como las diferentes tipologías de geomallas, los beneficios que presenta su uso y cómo seleccionarlas adecuadamente según el proyecto, así como el proceso de instalación con el que se debe proceder. El libro contiene explicaciones detalladas e ilustraciones y gráficos para poder mostrar de una forma muy rápida y visual todas las ventajas que suponen las geomallas en el sector de la construcción, concretamente, en la construcción de pavimentos y suelos. Se puede descargar la guía completa en https://texdelta.com/geomallas/.
Las geomallas de tejido no tejido son muy utilizadas en el sector de la construcción para reforzar y estabilizar suelos. Su estructura de red permite que la geomalla pueda ser combinada con otros geotextiles que le confieren propiedades específicas según las necesidades concretas del proyecto. El uso de geomallas para el refuerzo de pavimentos aporta resistencia, estabilización y tracción gracias a sus estructuras bidimensionales que interactúan con el suelo, de tal manera que complementan la resistencia a la tensión de éste y crean una resistencia capaz de recibir cargas y distribuirlas uniformemente.
El lanzamiento más reciente de Tex Delta es el ebook sobre la bentonita: “Geocompuesto de bentonita para la edificación”. Se trata de una guía práctica para que los profesionales conozcáis todos los detalles sobre el innovador sistema para la impermeabilización basado en la unión de geotextiles y bentonita. El libro hace un recorrido por los geocompuestos de bentonita para entender qué son, cómo se usan y cuáles son sus principales beneficios, así como el proceso de instalación a seguir.
La bentonita es un grano de arcilla de origen volcánico muy fino que se caracteriza por su capacidad de hinchamiento: hasta 16 veces su volumen en seco cuando es hidratada mediante agua. Esta cualidad, junto con la resistencia de los geotextiles, hace del geocompuesto de bentonita una eficiente membrana impermeable de larga durabilidad. Podéis descargar el ebook completo aquí: https://texdelta.com/geocompuesto-de-bentonita/.
No siempre es fácil estar a la última en todas las novedades que van surgiendo. Con los ebooks podremos estar al corriente y entender mejor qué hay de nuevo en cuanto a geotexitles, geomallas y fibras de refuerzo.
He escuchado ya varias veces la frase: “ la madera no la quiero en mi jardín que después hay que mantenerla y es costoso”. Quizás se deba a una leyenda quizá con el único sentido de desplazar a la madera del mercado a favor de otros materiales como el aluminio. El aluminio no es un mal material, pero al igual que los ladrillos y la pintura de cualquier fachada, envejece, desaparece.
Sin embargo a la madera, ese envejecimiento le otorga un aspecto rústico, y le favorece bastante, le ocurre más o menos como al vino.
Sí que es verdad que a lo largo de bastante tiempo no hubo protectores adecuados para la madera de exterior, se empleaban los mismos barnice que los utilizados para resguardar a la madera en interiores y lógicamente, esto no nos vale. Se cuarteaban con el sol y las bajas temperaturas, y a la primera de cambio, teníamos la madera sin proteger y con un aspecto bastante feo.
La revolución en los protectores de madera viene de la mano del lasur, barniz de poro abierto que tiene la cualidad de penetrar en la superficie de la madera sin formar la clásica película brillante de los anteriores barnices. Por otro lado, Impermeabiliza la madera y tiene la gran ventaja de que solo hay que volver a aplicarlo más o menos cada cinco años, y para más comodidad, se aplica de forma directa sobre el anterior tratamiento, olvidándonos de lijar. ¿Cuántas cosas me puedes decir, a bote pronto, que en tu casa o bien en tu jardín requieran de un mantenimiento sólo cada cinco años?, creo que pocas.
El lasur está recomendado en maderas blancas, son maderas que no están desprovistos de tratamientos con autoclave. Es muy común en porches y pérgolas de madera que estas se construyan en madera laminada de pino o bien abeto, y es en estos casos cuando debemos preservar la madera con lasur.
En maderas tropicales la cosa cambia, requieren la aplicación de aceites a fin de que no pierdan su color natural. Cuando dejan de estar protegidos se ponen grises debido a la oxidación de su superficie, pero no significa que la madera esté en mal estado.
Si nos hemos olvidado de aplicar aceite de conformidad con las recomendaciones del instalador, y deseamos recobrar el color natural de la madera, vamos a deber lijar bien la superficie mas oxidada y aplicar de nuevo el aceite protector. Tendremos de nuevo nuestra tarima de exterior como si fuera el primero de los días.
El uso de la cal en revestimientos de fachada se remonta a muchos años atrás, ya los griegos lo utilizaban. Es un tipo de revestimiento utilizado en la construcción tradicional que, por desgracia, se fue perdiendo con la entrada de nuevos sistemas constructivos de fachada que, en principio, se suponían mejores, como los enfoscados de cemento o los monocapas.
Tengo que confesar que yo, supongo que posiblemente al igual que te sucede a tí a no ser que estés especializado en rehabilitación, no he empezado a conocer el uso de la cal hasta hace relativamente poco tiempo, pues en la escuela no se mencionó apenas, que yo recuerde y desde luego en construcción de obra nueva su uso ha sido más que escaso en los tiempos de la burbuja.
Sin embargo, las ventajas que proporciona el uso de la cal en revestimientos de fachada es más que evidente, así que desde hace un tiempo vengo interesándome por el tema para tenerlo dominado en cuanto surja la posibilidad de poder aplicarlo.
Es por eso que me llamaron mucho la atención las jornadas sobre el uso de la cal (y de hormigones ligeros en rehabilitación, que así es el nombre completo de las jornadas) que está desarrollando la Fundación Laboral de la Construcción con la colaboración del Grupo Puma. Lo malo es que pasaron por Valencia y me fue imposible asistir a la jornada, tendré que esperar a que vuelvan a pasar por aquí.
La próxima jornada va a ser en Sevilla, por si te pilla cerca, ya que en estas jornadas es donde podrás aprender de verdad cómo usar la cal en rehabilitación, las características, ventajas, modos de aplicación... en definitiva, te lo recomiendo para que, poco a poco, todos volvamos a conocer el uso de este material y volvamos a prescribirlo.
Por cierto, si te interesa conocer las jornadas de la Fundación Laboral de la Construcción y los lugares donde se van a realizar puedes verlo en la lista de jornadas previstas. Recuerda que son gratis.
Hablemos un poco del material. La cal.
No quiero entrar a tratar de manera muy técnica el material, la cal, pero creo que es importante hacer mención para poder comprender de dónde le viene la característica de la permeabilidad de la que voy a hablar en el post.
La cal utilizada en revestimientos de fachadas proviene de la descomposición, a base de calor, de rocas calizas. Al aplicar una temperatura superior a los 900 ºC el carbonato cálcico se descompone por un lado en anhídrido carbónico y por otro lado en óxido de calcio.
El primero, el anhídrido carbónico, no nos interesa en este momento, lo que nos interesa es el óxido de calcio, que es una roca, también conocida como cal viva. Al unir la cal viva con el agua se produce hidróxido cálcico, osea, cal apagada, que es el material que utilizaremos para su uso en revestimientos de fachada. (Sí, lo sé, una explicación un poco escueta, pero no es el objeto del post)
Este material, una vez mezclado con agua en forma de pasta, endurece al reaccionar con el aire, el cual penetra en la masa y va creando microscópicos canales en la masa que permiten la transpiración del cerramiento.
De ahí la propiedad de permeabilidad de este tipo de materiales a base de cal.
Los morteros de cal apagada endurecen por contacto con el aire, que va creando microscópicos canales en la masa proporcionando la propiedad de permeabilidad, tan beneficiosa para este tipo de revestimientos.
Vemos por tanto que la cal apagada en pasta tiene la propiedad de endurecerse lentamente en contacto con el aire, siendo el conglomerante de los áridos que contenga la masa, pero además, al endurecer, a diferencia de los morteros de cemento, no se convierte en un material sólido compuestos por partículas "pegadas", sino que se reconstituye en la piedra original, es decir, se convierte en piedra, no en masa endurecida, lo que le aporta una mayor dureza que los morteros de cemento y por lo tanto mayor protección al cerramiento que reviste.
Es una verdadera transformación en piedra que puede durar unos seis meses hasta alcanzar su dureza definitiva, convirtiéndose además en un material con gran plasticidad, lo que será una gran ventaja frente a los movimientos que sufra por parte del cerramiento, como ocurre por ejemplo en encuentros de diferentes materiales (ladrillo-forjado) o en esquinas de huecos, donde suelen aparecer pequeñas fisuras debidas a esos movimientos.
La permeabilidad de la cal en revestimientos de fachada
En la construcción tradicional, los anchos muros sin cámara no impedían el paso del aire a su través, es decir, eran cerramientos permeables, transpirables, que permitían el paso de vapor de agua sin crear barreras.
Al modernizarse los materiales de construcción, en muchos casos no se tuvo en cuenta esta característica, por lo que los revestimientos utilizados impedían el paso de vapor de agua hacia el exterior, lo que provoca en muchos casos que se desprendan las pinturas o que se formen bolsas abombadas por la humedad.
En el interior de las viviendas se genera vapor de agua. Cocinas, baños, respiración... todo esto genera ese vapor de agua que, en caso de no poder salir hacia el exterior, queda en el interior de los muros que, en caso de que se encuentren fríos, manifestarán las temidas humedades por condensación.
Vemos por tanto que la permeabilidad al vapor de agua y los riesgos de condensación o de retención de humedad en los capilares de un muro por no respirar éste bien es una cuestión de suficiente importancia como para tener en cuenta el tipo de revestimiento que se vaya a utilizar.
En la rehabilitación de edificaciones históricas suele ser causa del fracaso de las reposiciones de morteros en fachadas con morteros poco permeables, son edificaciones que, debido al tipo de muros que presentan, suelen absorber agua del terreno por acción capilar. Esta humedad procedente del suelo se evapora por el muro hacia el exterior sin causar daño, a no ser que tenga impedida esta evaporación por culpa de un revestimiento impermeable, lo que causará el desprendimiento de éste al condensar el agua en su zona de encuentro con la fachada.
Suele ocurrir que, normalmente por desconocimiento, al aparecer este tipo de humedades por condensación se opte por colocar un alicatado tapando la zona afectada. No puede haber un error mayor, ya que lo que se está consiguiendo es que la humedad tenga todavía más difícil su evaporación hacia el exterior, por lo que seguirá ascendiendo hasta encontrar una zona que le permita su evaporación, que suele ser la parte alta del zócalo alicatado, volviendo a aparecer de nuevo las mismas humedades por capilaridad, pero más arriba que antes.
Dejar respirar los muros evitando revestimientos impermeables evita la aparición de humedades de condensación y las producidas por ascensión capilar.
Esta circunstancia se evitaría con un revestimiento permeable que permitiera la evaporación natural, como son los revestimientos de cal de los que estamos hablando.
Mejoras en edificios modernos
Muchos de los edificios modernos sufren lo que en algunas publicaciones se denomina como el "síndrome del edificios enfermo". Es un término amplio y con diferentes definiciones en función de dónde se recopile información, pero lo que casi todos los autores coinciden es en que la falta de permeabilidad de los edificios puede llegar a provocar dolencias y faltas de salubridad en los usuarios de los mismos.
Los materiales plásticos y poco porosos impiden la transpiración natural de os muros. Lo que en principio parecía una ventaja por evitar pérdidas de calor en el interior del edificio resultó ser un grave inconveniente que mermaba la calidad de los cerramientos.
La falta de aislamiento y no tener en cuenta una buena ventilación en las cámaras de las fachadas hacen que, el vapor de agua generado en baños, cocinas y la propia respiración de los habitantes acabe condensando en las superficies frías de los cerramientos exteriores, ya que el índice de humedad es elevado por falta de permeabilidad y por lo tanto ese exceso de humedad acaba condensando en dichas superficies más frías al alcanzar el punto de rocío. Si se dejara transpirar esos muros, parte del contenido de humedad del aire se eliminaría, evitando en gran medida este problema.
La cal, como hemos visto, es un material que colabora para que los muros puedan transpirar con mayor facilidad, por ello el encalado y la aplicación de morteros de cal resulta ser un buen sustituto de los morteros de cemento, las pinturas acrílicas o las pinturas plásticas, además de aportar otras interesantes características de las que hablaremos en otra ocasión.
La elevada transpirabilidad que proporciona la cal mejora la habitabilidad del edificio y permite una renovación natural del aire interior, lo que contribuye a mejorar las condiciones de salubridad al disminuir el riesgo de condensaciones.
En definitiva, como os comentaba al principio, estoy viendo múltiples ventajas en el uso de la cal como revestimiento y por eso me estoy interesando por aprender más sobre el tema, modos de aplicación, profesionales que lo apliquen, formas de solucionar encuentros y detalles, incompatibilidades... en definitiva, estoy empezando a aprender por mi cuenta algo que me gustaría que me hubieran enseñado en la escuela, o que hubiera utilizado en mi época en constructora de obra nueva.
Espero que te sirva para despertar también en ti el interés por este material y que poco a poco seamos más los que prescribamos estos revestimientos en nuestras obras.
Tengo que agradecer a Grupo Puma la información que me han facilitado para la redacción de este post, que me servirá también para otros que tengo pensados sobre el tema.
Si quieres encontrar más información te recomiendo que le des un vistazo a los libros "Revestimientos continuos tradicionales y modernos", de Jesús González Martín y "Supervisión de ejecución de acabados, revestimientos y cubiertas", de Pablo Collado y David Nuño.
Por supuesto, si te ha interesado el tema, comprueba en el listado de jornadas de la Fundación Laboral de la Construcción para ver si van a pasar cerca de tu ciudad, ya sea con las jornadas sobre cal o sobre cualquier otro tema de los previstos. Es una formación interesante, práctica y gratis, así que no pierdes nada, es más, seguro que ganas.
Solo un post cortito a modo de noticia, ya que me parece especialmente interesante.
El próximo jueves día 12 se desarrollará una Jornada Gratuita en Valencia, en el centro de formación de la Fundación Laboral de la Construcción, en la que se explicará el uso en rehabilitación de morteros de cal, que por desgracia han estado durante mucho tiempo infrautilizados y han sido poco conocidos para muchos técnicos y profesionales, entre lo que me incluyo.
Tras llevar un tiempo dando un vistazo a este tipo de material, los morteros de cal, me parece que tiene muchísimas ventajas frente a los enfoscados o los monocapas, que han sido los sistemas más utilizados últimamente. No sé bien porqué, pero es un hecho que cuando se piensa en enfoscar una fachada, el mortero de cal no es el primer material que se nos pasa por la cabeza para llevarlo a cabo, al menos hasta ahora en mi caso.
Además de hablar de morteros de cal se tratará también el uso de hormigones ligeros para la restauración de forjados.
Este material sí que lo he utilizado mucho más, incluso he escrito algún post hablando del refuerzo de forjados y también hice un podcast sobre el tema en el que entrevisté a Ana Fernández-Cuartero, pero nunca está de más ver novedades de los productos y consejos de aplicación directos de parte de los fabricantes.
Se trata de una jornada teórico-práctica, así que hay que ir armado con botas de obra y venir dispuesto a mancharse, que al fin y al cabo es lo que mola ¿no? Aprender de primera mano, de cerca, con las manos en la masa ;)
Es una jornada tanto para técnicos como para aplicadores. Al fin y al cabo todos vamos de la mano en cuanto a la aplicación de productos en obra, nuestro objetivo es común... que se aplique correctamente.
Esta misma jornada se va a realizar también en otros puntos de España, pero a mi la que me pilla cerca es esta, así que es la que iré.
Si eres de Valencia y te animas nos vemos allí y sino, `pues dale un vistazo en la información para ver cuándo se realizará en tu zona.
Bueno, pues nada, esto es lo que te quería contar. Dale un vistazo a los enlaces que te he dejado y a ver si te animas, que siempre es bueno aprender, sobretodo cuando te lo ponen gratis ;)
El principal daño que sufren las cubiertas es el de las filtraciones de agua. De hecho, en muchas ocasiones una cubierta no se repara hasta que no se detectan filtraciones en las viviendas inferiores, dejando que se vaya degradando con el tiempo hasta unos extremos que obligan a la práctica sustitución de la misma por falta de mantenimiento.
El objetivo de este post NO es el de profundizar en los sistemas de impermeabilización que voy a mencionar (lo haré en otros), sino más bien enumerar los sistemas de impermeabilización de cubiertas que se suelen utilizar para la reparación de las mismas.
Bueeeeeno, va… no solo enumerar. Me voy a mojar un poquito y voy a dar mi opinión sobre los sistemas que considero más utilizados para poder ayudar a la elección del sistema según sea el caso, ya que no hay un sistema universal que sirva para todas las situaciones, sino que cada cubierta puede necesitar de un tipo de impermeabilización u otro en función de las circunstáncias de la misma.
Sistemas de impermeabilización de cubiertas existentes
Los sistemas que vamos a comentar son cuatro. Existen muchos otros sistemas de impermeabilización y seguramente alguno de vosotros me tirará de las orejas por habérmelo dejado, pero considero que éstos son fundamentalmente los más extendidos para la reparación de cubiertas.
Los sistemas que voy a comentar son:
[unordered_list style=»bullet»]
Caucho clorado (clorocaucho).
Membranas líquidas con base poliuretano.
Láminas bituminosas.
EPDM (Etileno Propileno Dieno Monómero).
[/unordered_list]
Os las voy contando:
Caucho clorado o clorocaucho
Ventajas:
[unordered_list style=»tick»]
Barato.
Rápido de aplicar.
Fácil de aplicar.
[/unordered_list]
Inconvenientes:
[unordered_list style=»red-x»]
Poca duración.
Solución puntos singulares.
Fácil de aplicar (se pone poco cuidad, provocando mal uso)
[/unordered_list]
Los que seguís el blog desde hace un tiempo ya conoceréis mi opinión sobre éste material, pues escribí un post hace un tiempo en el que el título lo decía todo… «Odio el clorocaucho«. Si, así, tal cual.
Clorocaucho en cubierta
No voy a volver a decir aquí todo lo que ya dije detalladamente en aquel post (te invito a leerlo allí). Por resumir en pocas palabras decía que no odio al material en sí, ya que puede cumplir algunas funciones a la perfección, sino que odio el uso que se está haciendo de él, hundiendo su reputación por culpa de «profesionales» que ponen poco cuidado en su aplicación y que han causado verdaderas estafas a las comunidades de propietarios.
Al ser un material económico y fácil de colocar es el preferido por las comunidades, pues se les vende que solucionan un grave problema de una manera barata y rápida, pero nadie les dice que para que quede solucionado de verdad, la aplicación tiene que hacerse de determinada manera y que la duración de la solución es muy inferior a la de otros sistemas que, aunque un poco más caros, tienen una duración mucho mayor y por lo tanto acaban siendo más baratos a largo plazo.
Se suele dejar como superficie de acabado, sin ningún tipo de protección, lo que hace que en azoteas con uso continuado (para subir a tender) se desgaste por el uso al poco tiempo, reduciendo aún más su duración.
¿Para que recomendaría entonces el clorocaucho? Pues para reparaciones de urgencia o puntuales que estén a la espera de una reparación de mayor envergadura a corto/medio plazo. Existiendo otros sistemas para poco más lo recomendaría.
Membranas líquidas con base poliuretano
Ventajas:
[unordered_list style=»tick»]
Resistencia a rayos UV y al tiempo.
Elásticidad elevada.
Continuidad de la superficie. No juntas.
Fácil de aplicar.
[/unordered_list]
Inconvenientes:
[unordered_list style=»red-x»]
Garantizar espesor mínimo de la membrana.
Solución puntos singulares.
Fácil de aplicar (se pone poco cuidad, provocando mal uso)
[/unordered_list]
Al igual que el clorocaucho, ésta es una solución que se aplica in situ, «pintando» o cubriendo la superficie de la cubierta con un material líquido que al secar forma una membrana de cierto espesor que es la capa de impermeabilización.
Hasta aquí todo igual que el clorocaucho, pero a diferencia de éste, las membranas con base poliuretano adquieren un espesor y elasticidad que aporta una mayor garantía de funcionamiento, ya que tienen mayor capacidad de absorción de movimientos sin depender tanto de armados (refuerzos de fibras que complementan al sistema) y además, al ser resistentes a la acción de los rayos ultravioleta su duración es mucho mayor.
Cubierta impermeabilizada con membrana de poliuretano. Imagen de IMPERFY
Éste material se aplica sobre la superfice existente en la terraza (tras un tratamiento de limpieza y preparación adecuado) utilizando rodillos de pintor, o bien aplicaco con espátula para dar mayor espesor o también aplicado con pistola.
Según he visto en algunos documentos y fichas comerciales, podría incluso quedar la membrana sin protección, es decir, como capa de acabado sobre la que las personas pudieran pisar. Mmmm… quizá en una terraza con poco tránsito podrías ser, pero no se si me arriesgaría a colocarla sin protección en la azotea de un edificio a la que suben asiduamente a tender, arriesgándo que sufriera un pinchazo por algún tacón o por piedras que se puedan quedar en los zapatos y que pudieran clavarse en la membrana. En mi opinión es mejor dejarla protegida para evitar daños mecánicos, pero según los fabricantes se puede hacer (yo nunca las he colocado, así que mi opinión es un poco teórica).
El problema que le veo a éste sistema es muy parecido al del clorocaucho, es decir, su supuesta «facilidad» de aplicación hace que algunos atrevidos se animen a colocarlo ellos mismos sin prestar atención a las especificaciones del fabricante para su utilización o bien no tratan adecuadamente los puntos singulares de las cubiertas, como los sumideros, esquinas o encuentros, que son el principal foco de fallos en la colocación de impermeabilizaciones en terrazas.
A la hora de contratar a profesionales que apliquen el sistema de impermeabilización con membrana de poliuretano prestaría especial atención a la formación específica que pudieran acreditar por parte de fabricantes, además de comprobar el tratamiento que piensan dar a los encuentros, pues estos precisan la colocación de elementos auxiliares que garanticen el buen funcionamiento.
Detalle de impermeablización de cubierta. Zona de sumideros. Imagen de IMPERFY
Creo que puede ser una solución interesante para cubiertas cun muchas esquinas y recovecos, pues al formar una membrana continua, si estos puntos están bien resueltos se puede ahorrar gran cantidad de material por desperdicios, cortes y sobrantes para adaptar a esas formas.
Aquí os dejo un vídeo donde se puede ver la aplicación de membrana de poliuretano, aunque me hubiera gustado encontrar alguno donde se viera el tratamiento de los puntos singulares:
Láminas bituminosas
Ventajas:
[unordered_list style=»tick»]
Sistema tradicional de probada eficacia.
Muchas variantes para adaptarse a necesidades.
Puntos singulares asumidos por colocadores.
Mayor garantía si está bien colocado.
Colocador especializado.
[/unordered_list]
Inconvenientes:
[unordered_list style=»red-x»]
Tiempo de colocación.
Uso de soplete (riesgo de quemaduras).
Necesita protección.
Mayor trasiego de materiales.
Muchas juntas (aumenta probabilidad de fallo).
Mayor volumen de obra.
Muy dependiente de la colocación.
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Son las de toda la vida, las que tradicionalmente se han venido llamando láminas de asfalto (aunque no lo fueran). Esos rollos negros que se colocan calentando el material con unos sopletes, de manera que se funde para pegarse con la lámina contigua o con el soporte.
Uno de los mayores inconvenientes que tienen es que se encarece su colocación, ya que precisa de una protección contra la intemperie, pues la acción de los rayos ultravioleta pueden rigidizar el material perdiendo sus propiedades de elasticidad e impermeabilización. Esto obliga a que se coloque algún elemento sobre la misma para evitar la insolación directa, que puede ser un suelo tradicional, suelo flotante o bien otro tipo como suelos ligeros de caucho reciclado.
Evidentemente no en todos los casos se puede colocar otro suelo encima del existente, recordemos que estamos tratando con cubiertas existentes y en ocasiones no son capaces las estructuras de los edificios donde se encuentran de soportar más peso, por lo que en esos casos es necesario demoler la cubierta existente y reconstruir una nueva, al menos hasta alcanzar la capa de pendientes.
Impermeabilización de cubierta con lámina bituminosa.
Tienen una menor capacidad de soportar deformaciones del soporte, por lo que es más importante si cabe el tratamiento correcto de puntos singulares como juntas de dilatación, encuentros con esquinas, sumideros etcétera, así que es importante que se contrate teniendo claro que se van a tratar esos puntos. Por cierto, hablando de sumideros, no se deben colocar cazoletas con faldones de PVC en cubiertas impermeabilizadas con lámina bituminosa, pues no funcionan bien. Si, ya se que lo tenías claro (tu, técnico) pero seguro que muchos profanos que se asoman aquí a buscar información les vendrá bien el comentario y les puede evitar alguna gotera.
Hay algunas de éstas láminas ya tienen una capa de protección (las llamadas autoprotegidas), aunque esa protección es únicamente para evitar daños por exposición a la intemperie ya que no evita los daños mecánicos que pueda ocasionar un uso continuado sobre la impermeabilización. Si la cubierta no va a ser muy transitada puede ser una muy buena solución colocar una lámina autoprotegida.
Podría escribirse un libro sobre éste tipo de impermeabilización (de hecho los hay, mira en www.LibrosDeConstruccion.com) pues hay multitud de tipos de material (oxiasfalto, betún modificado con elastómeros, con plastómeros…), tipos de aplicación (adherida, no adherida, monocapa, bicapa), con armado (de diferentes tipos), sin armado… en definitiva gran cantidad de opciones que pueden dificultar la elección.
Lo más habitual (ojo, cuidado que esto es generalizar mucho) es colocar una lámina de betún modificado tipo LBM, con 4 kg por metro2 y armado simple con fibra de vidrio o de poliester, colocada adheridas en una capa (siempre dará más garantía colocar en dos capas).
Con una configuración de este tipo, una adecuada colocación y la protección de la lámina no debería haber problemas en esa cubierta, pero como sucede en todos los sistemas, no depende tanto del material que utilicemos como de la colocación que se haga del mismo y el cuidado que se tenga en no dañar la impermeabilización durante el resto de trabajos de la obra, como ocurre en las siguiente imágenes.
Pila de ladrillos sobre lámina… lo mejor para pincharla y provocar una gotera.Cascotes tras la lámina, lo mejor para romperla
Si no fuera por estas situaciones una impermeabilización con lámina bituminosa tienes una muy buena duración, por lo que su coste más elevado suele verse compensado por una amortización a mayor plazo, lo que acaba siendo más barato para los vecinos.
¿Cuando recomendaría el uso de láminas bituminosas? Siempre que no se trate de una reparación puntual, sino una sustitución completa del sistema de impermeabilización. Siempre vendrá el que le venda a la comunidad que se puede aplicar lorocaucho a toda la terraza por una cuarta parte del precio, pero a largo plazo es una inversión que compensará con creces a pesar de la incomodidad de mayor cantidad de obra y mayor coste inicial.
Os dejo un vídeo donde se muesra la colocación de una impermeabilización con lámina bituminosa.
Láminas EPDM
Ventajas:
[unordered_list style=»tick»]
Resistencia a la intemperie sin necesidad de protección.
Puntos singulares asumidos por colocadores.
Mayor garantía si está bien colocado.
Colocadores muy especializado.
Posibilidad de tamaño a medido. Menos juntas.
Garantías a largo plazo sobre material y colocación (si homologado).
[/unordered_list]
Inconvenientes:
[unordered_list style=»red-x»]
Tiempo de colocación.
Coste de material.
Trasiego de material.
Muy dependiente de la colocación.
[/unordered_list]
Es sin duda el sistema que más me gusta, lástima que sea el que tiene un coste de material más elevado (puede competir perfectamente con las láminas bituminosas) aunque da una garantía que te permite respirar tranquilo durante mucho tiempo.
Cubierta impermeabilizada con EPDM. Imágen de SOCYR
Se trata de un materia de caucho, tremendamente elástico y resistente a la intemperie, tanto que se coloca en balsas de grandes superficies y queda totalmente expuesto sin ningún problema.
Una de las grandes ventajas es que se pueden hacer láminas a medida, de manera que se pueden minimizar las juntas y por lo tanto reducir los puntos de fallo de colocación.
La colocación no es complicada, pero requiere del uso herramientas específicas y de adhesivos químicos que hay que saber utilizar, además de conocer el tratamiento que hay que darle a los puntos singulares (como ocurre con el resto de materiales). La mejor opción es colocarlo con profesionales especializados, lo que permite que se puedan firmar garantías de más de 15 años de colocación e incluso de 30 años sobre el material.
Detalle de junta de dilatación con EPDM
Otra gran ventaja es la tremenda elasticidad de este material, pudiendo deformarse hasta en un 300% y recuperar su forma inicial, además de no sufrir prácticamente deformaciones por variaciones de calor que puedan modificar las condiciones de colocación. Esto es importante ya que aunque hay que tener especial cuidado con los puntos singulares, es un material que puede absrber las deformaciones del soporte sin romper, evitando así filtraciones puntuales.
A pesar de la elevada elasticidad y resistencia, los fabricantes recomiendan la protección de la lámina en caso de colocarse en cubiertas que vayan a ser transitables, por lo que se tendría que complementar la instalación de la impermeabilización con la ejecución de un suelo o bien con la colocación de un pavimento ligero como puede ser de caucho reciclado.
Impermeabilización de EPDM protegido con caucho reciclado
En caso de colocarse en una cubierta que no vaya a sufrir mucho tránsito puede perfectametne dejarse sin proteger, en cuyo caso puede ser interesante pintar la superfice negra de la lámina de un color blanco para evitar el recalentamiento que produciría sobre la vivienda inferior.
Este tipo de lámina es de fácil reparación, por lo que si está colocada sin protección y se detecta una gotera puntual solo habría que localizar el punto de fallo y reparar parcheando la zona, al fin y al cabo no deja de ser el mismo material que las ruedas de bici.
He encontrado también un vídeo, más bien varios vídeos en los que se muestra de manera muy didáctica la colocación tanto de la lámina como el tratamiento de puntos singulares.
¿Dónde recomendaría su colocación? Sin dudarlo en cualquier caso que se estuviera pensando en realizar ejecutar una impermeabilización con lámina bituminosa, pero sobretodo en cubiertas con gran superficie y gran cantidad de salientes, escalones, juntas o encuentros. Es el sistema que más recomiendo.
Aprovechar para aislar
No quiero cerrar el post y la serie de artículos hablando de reparación de cubiertas sin recomendar la colocación de aislamiento sobre la cubierta a reparar.
Se va a hacer una imporrtante inversión, seguramente se tiene que desmontar la cubierta o en el mejor de los casos se colocará alguno de los sistemas mencionados sobre el suelo existente, pero en cualquier caso, ya que se hace una inversión hay que aprovechar para mejorar el aislamiento del edificio.
Nota final y conclusión
Como os habréis dado cuenta en todos los sistemas he indicado como inconveniente la dependencia de la colocación, y es que reparar una cubierta no depende tanto del material que se escoja, al final todos impermeabilizan, sino que depende más de la pericia y buen hacer de quien coloque el material así que, administradores, presidentes de comunidad y demás responsables de contratación, no os dejésis llevar por ofertas increibles que vana solucionar vuestro problema con el mejor de los materiales con el menor de los precios, investigad las condiciones de colocación, la experiencia y la formación de quien contratáis y no escatiméis en la colaboración de un técnico que pueda supervisar los trabajos. Acaba saliendo a cuenta.
Recuerda que tienes otros dos artículos ya publicados hablando sobre el tema de reparación de cubiertas existentes:
[hr] [typography font=»Coming Soon» size=»24″ size_format=»px» color=»#3377e6″]Si te ha parecido interesante [highlight]no olvides compartirlo[/highlight] con tus contactos en las redes sociales, quizá a alguno de ellos también le interese. Gracias.[/typography][hr]
Hace unos días tuve la oportunidad de asistir a unas jornadas sobre hormigones especiales organizadas por el Colegio de Aparejadores de Valencia y CEMEX, en la cual nos dimos cuenta muchos de los asistentes del poco conocimiento que tenemos de la variedad de hormigones que tenemos a nuestro alcance para multitud de diferentes problemas.
En mi caso, gracias a haber cursado el Máster en Tecnología de la Edificación, conocía teoricamente gran parte de los hormigones comentados, pero durante las jornadas tuvimos la oportunidad de ver y tocar muestras de éstos hormigones, ver su puesta en obra, conocer casos reales de aplicaciones en obra y conocer de primera mano las ventajas y desventajas de cada uno de ellos. (más…)
Con el título del post creo que lo digo todo… ¡¡Odio el clorocaucho!! No es una manía al material en especial, el cual seguramente debe tener un montón de aplicaciones para el que su uso es excepcionalmente adecuado, lo que odio es el uso indiscriminado que se hace del mismo, dando la sensación en algunas ocasiones de que se trata de un material mágico que sirve para todo.